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1.
Av. psicol. latinoam ; 41(1): 1-16, ene.-abr. 2023.
Article in Portuguese | LILACS, COLNAL | ID: biblio-1428056

ABSTRACT

Estruturas de interação são padrões repetitivos que ocorrem entre terapeuta e paciente, mesmo que am-bos não sejam conscientes disso. Na pesquisa empíri-ca, elas ajudam a compreender como se estabelece o processo de mudança em psicoterapia. Nesse sentido, esta investigação utilizou 68 sessões de psicoterapia psicanalítica de um caso de uma jovem paciente com Transtorno de Personalidade Borderline (tpb) com o objetivo de identificar as estruturas de interação e sua correlação com o tempo de tratamento. Os dados fo-ram gravados em vídeo e posteriormente codificados através do Psychotherapy Process Q-Set (pqs), por duplas de juízes treinados na metodologia Q-Sort. A partir desses dados, foi realizada a análise fatorial do tipo Q de componentes principais que indicou quatro estruturas de interação, sendo fator 1: Colaborativo; fa-tor 2: Resistência; fator 3: Aliança/Ruptura e fator 4: Apoio/Encorajamento. As estruturas indicaram que a interação se voltou para o trabalho de manutenção da interação colaborativa, através de uma posição empá-tica do terapeuta, direcionado para o reconhecimento dos estados internos do paciente. Apesar do trabalho colaborativo, a resistência também surgiu como um padrão repetitivo. O terapeuta se tornou diretivo com intervenções estruturadas e questionando o paciente, desta forma contribuindo para o desenvolvimento da capacidade de mentalização. Implicações sobre o pro-cesso psicoterápico e indicações para estudos futuros são apresentados com o intuito de contribuir na com-preensão sobre o tratamento de pacientes com tpb em psicoterapia psicodinâmica.


Las estructuras de interacción son patrones repetitivos que ocurren entre el terapeuta y el paciente, incluso si ambos no son conscientes de esto. En la investigación empírica ayudan a comprender cómo se establece el proceso de cambio en psicoterapia. En tal sentido, esta investigación utilizó 68 sesiones de psicoterapia psicoanalítica del caso de un paciente joven con Tras-torno Límite de la Personalidad (tlp) para identificar las estructuras de interacción y su correlación con el momento del tratamiento. Los datos fueron grabados en video y posteriormente codificados utilizando el Q-Set Proceso de Psicoterapia (pqs), por pares de jueces en-trenados en la metodología Q-Sort. Con base en estos datos, se realizó un análisis factorial del tipo Q de componentes principales, el cual indicó cuatro estructuras de interacción, siendo factor 1: Colaborativo; factor 2: Resistencia; factor 3: Alianza/Disrupción y factor 4: Apoyo/Estímulo. Las estructuras indicaron que la interacción se tornó al trabajo de mantener la interacción colaborativa, a través de una posición empática del terapeuta, dirigida al reconocimiento de los estados internos del paciente. A pesar del trabajo colaborativo, la resistencia también surgió como un patrón repetitivo. El terapeuta se volvió directivo con intervenciones estructuradas cuestionando al paciente, contribuyendo así al desarrollo de la capacidad mentalizadora. Se presentan implicaciones en el proceso psicoterapéutico e indicaciones para futuros estudios con el objetivo de contribuir a la comprensión del tratamiento de pacientes con tlp en psicoterapia psicodinámica.


Interaction structures are repetitive patterns of interaction between therapist and patient, even if they are not conscious of it. In empirical research, they help to un-derstand how the process of change in psychotherapy is established. In this sense, the current research used 68 sessions of psychoanalytic psychotherapy in a young patient with Borderline Personality Disorder (bpd) to identify the interaction structures and their correlation with different moments of treatment. The sessions were recorded on video and later encoded through the Psy-chotherapy Process Q-Set (PQS) by pairs of judges trained in Q-Sort methodology. A factor analysis of the Q-type of main components was performed based on these data, which indicated four interaction structures. Factor 1: Collaborative; factor 2: Resistance; factor 3: Alliance/Rupture; and factor 4: Support/Encornment. The structures indicated the interaction became a work of maintenance of the collaborative interaction through an empathic position of the therapist, focused on recognizing the patient's internal states. Despite the collaborative work, resistance also appeared as a repetitive pattern. The therapist became more directive with more structured interventions questioning the patient, thus, contributing to the development of the capacity of mentalization. Implications for the psychotherapeutic process and in-dications for future studies are presented to contribute to the comprehension of the treatment of patients with bpd in psychodynamic psychotherapy.


Subject(s)
Humans , Patients , Personality , Psychotherapy , Research , Therapeutics , Borderline Personality Disorder , Factor Analysis, Statistical
2.
Article in Spanish | LILACS-Express | LILACS | ID: biblio-1515141

ABSTRACT

Objetivo: Mapear la evidencia científica respecto de las autolesiones no suicidas y trastorno límite de la personalidad en adolescentes de muestras comunitarias o clínicas en el contexto internacional. Introducción: Las autolesiones no suicidas corresponden a un importante campo de investigación en el espectro de suicidio, no obstante, son diversas las perspectivas para su conceptualización. La literatura señala ampliamente la comorbilidad entre las autolesiones no suicidas y el trastorno límite de la personalidad. Métodos: Scoping review basada en la metodología propuesta por el Joanna Briggs Institute. Se utilizaron las bases de datos Ovid, Science Direct, Proquest, Biblioteca Virtual de Salud y Web of Science. La búsqueda fue realizada en fuentes publicadas del 2011 hasta noviembre de 2021 en idiomas español, inglés y portugués. Resultados: La muestra final estuvo conformada por 12 artículos extraídos que cumplieron con los criterios de inclusión. Se encontraron cuatro categorías: curso longitudinal de las autolesiones no suicidas y trastornos límite de la personalidad en adolescentes, marcadores neuronales-fisiológicos de las autolesiones no suicidas y trastornos límite de la personalidad en adolescentes y riesgos psicosociales asociados a las autolesiones no suicidas y trastornos límite de la personalidad. Conclusiones: Se requieren más estudios interdisciplinares en el campo de las autolesiones no suicidas y trastornos límite de la personalidad en adolescentes. Se evidencia la necesidad de estudiar el curso longitudinal, marcadores neuronales-fisiológicos y riesgos psicosociales para mejorar la especificad de las intervenciones en muestras clínicas.


Objective: To map the scientific evidence regarding non-suicidal self-harm and borderline personality disorder in adolescents from community or clinical samples in the international context. Introduction: Non-suicidal self-harm corresponds to an important field of research in the suicide spectrum; however, there are diverse perspectives for its conceptualization. The literature widely points out the comorbidity between non-suicidal self-harm and borderline personality disorder. Methods: Scoping review based on the methodology proposed by the Joanna Briggs Institute. The Ovid, Science Direct, Proquest, Virtual Health Library and Web of Science databases were used. The search was carried out in sources published from 2011 to November 2021 in Spanish, English and Portuguese languages. Results: The final sample consisted of 12 extracted articles that met the inclusion criteria. Four categories were found: longitudinal course of non-suicidal self-harm and borderline personality disorders in adolescents, neuronal-physiological markers of non-suicidal self-harm and borderline personality disorders in adolescents, and psychosocial risks associated with non-suicidal self-harm and borderline disorders. of personality. Conclusions: More interdisciplinary studies are required in the field of non-suicidal self-harm and borderline personality disorders in adolescents. The need to study the longitudinal course, neuronal-physiological markers and psychosocial risks is evident to improve the specificity of interventions in clinical samples.

3.
Article in Spanish | LILACS-Express | LILACS | ID: biblio-1535313

ABSTRACT

Introducción: La investigación actual y los artículos rastreados sobre adversidad temprana y sesgos cognitivos en pacientes con trastorno límite de la personalidad (TLP) evidencian la relación entre estas variables y la gravedad de los síntomas clínicos de este trastorno. Objetivo: Revisar sistemáticamente la evidencia de la relación entre adversidad temprana, sesgos cognitivos y agudización de los síntomas del TLP. El vacío investigativo tiene que ver con el tipo específico de adversidad temprana y su relación con el tipo específico de sesgos cognitivos y el curso del TLP de pacientes con este diagnóstico. Metodología: Se realizó una revisión sistemática de la literatura y para reportar la evidencia se utilizó la versión 2020 de la declaración Prisma. Las bases de datos consultadas fueron Scopus, Pubmed, Web of Science y PsycInfo. En la búsqueda también se incluyeron bases de datos de literatura gris como Google Académico, Open Gray y WorldCat. Resultados: En total se incluyeron en el estudio 13 artículos que satisficieron criterios de originalidad, temática estudiada (adversidad temprana, funcionamiento cognitivo y sintomatología límite) y población indicada (pacientes con diagnóstico de TLP). Conclusiones: Si bien existe evidencia de que la adversidad temprana en general es un factor de riesgo para el TLP, se necesita más investigación para comprender los tipos específicos de adversidad que pueden estar más fuertemente relacionados con el desarrollo del TLP. Si bien algunos estudios han identificado sesgos cognitivos en individuos con TLP, poco se conoce sobre el modo en que estos sesgos se desarrollan y cambian con el tiempo, o según la etapa de exposición del paciente a la adversidad temprana.


Introduction: Current research and articles on early adversity and cognitive biases in patients with borderline personality disorder (BPD) demonstrate the relationship between these variables and the severity of the clinical symptoms of this disorder. Objective: The aim was to systematically review the evidence of the relationship between early adversity, cognitive biases, and exacerbation of symptoms of borderline personality disorder. The research gap concerns the particular type of early adversity and its relationship with the specific type of cognitive biases and the course of BPD in patients with this diagnosis. Methodology: We conducted a systematic literature review, and the Prisma statement version 2020 was used to report the evidence. The databases consulted were Scopus, Pubmed, Web of Science, and PsycInfo. Gray literature databases, such as Google Scholar, Open Gray, and WorldCat, were also included in the search. Results: We included 13 articles in the study that met the criteria for originality, studied theme (early adversity, cognitive functioning, and borderline symptomatology), and target population (patients diagnosed with a personality disorder). Conclusions: We found that while there is evidence that early adversity, in general, is a risk factor for BPD, further research is needed to understand the specific types of adversity that may be more strongly related to the development of BPD. In addition, although some studies have identified cognitive biases in individuals with BPD, little is known about how these biases develop and change over time or according to the stage of the patient's exposure to early adversity.

4.
Rev. colomb. psiquiatr ; 51(4): 330-334, oct.-dic. 2022. tab
Article in Spanish | LILACS-Express | LILACS | ID: biblio-1423883

ABSTRACT

RESUMEN La diferencia clínica entre el trastorno bipolar y el trastorno límite de la personalidad siempre ha sido un reto diagnóstico, sobre todo con el trastorno bipolar tipo II, y con los cuadros subumbrales, lo cual abre un sesgo diagnóstico con las consiguientes repercusiones de un tratamiento no adecuado. Ambas afecciones reciben en gran proporción un diagnóstico previo equivocado. En este artículo se hace énfasis en las principales diferencias clínicas entre ambas enfermedades. Se presenta el caso de una paciente con una larga historia de síntomas psiquiátricos que se inició en la infancia, con muchas dificultades en su funcionamiento, que cumplían criterios de ambos trastornos, lo cual apunta a comorbilidad; en el seguimiento respondió favorablemente a los psicofármacos, y su diagnóstico se inclinó hacia el espectro bipolar, por la notable mejoría. Sin embargo, no debe dejarse de lado la comorbilidad por su alta presentación.


ABSTRACT The clinical difference between bipolar disorder and borderline personality disorder has always been a diagnostic challenge, especially with type II bipolar disorder and subthreshold symptoms, opening a diagnostic bias with the consequent repercussions of inappropriate treatment. Both pathologies are often misdiagnosed initially. The objective of this article is to emphasise the main clinical differences between the two pathologies. We present the case of a patient with a long history of psychiatric symptoms that started in childhood, with considerable functional impairment, who met the criteria for both disorders, pointing to comorbidity. During follow-up, she responded favourably to psychotropic drugs, pushing the diagnosis towards the bipolar spectrum, due to the notable improvement. However, comorbidity should not be neglected due to its high presentation.

5.
Psocial (Ciudad AutoÌün. B. Aires) ; 8(1): 3-3, ene. 2022. tab, graf
Article in English | LILACS-Express | LILACS | ID: biblio-1406444

ABSTRACT

Abstract Introduction: People with comorbid borderline personality disorder (BPD) and substance abuse disorder (SUD) show great affectation and poorer treatment outcomes. Objective: The aim was to examine useful psychological treatments for people with co-morbid BPD and SUD. Method: The Cochrane Library, ISOC, Psychodoc, ProQuest Central, Pubmed, Web of Science and Scopus databases were consulted using a systematic literature review following PRISMA standards. A 185 articles were obtained, of which 12 were selected taking into account the inclusion criteria. The process was carried out by two independent evaluators and the level of agreement was excellent. Results: there are a variety of therapeutic options that, in general, improve the symptoms associated with BPD but not with SUD. Conclusion: more research is needed to evaluate the usefulness of psychological therapies in these patients.


Resumen Introducción: Las personas con trastorno límite de la personalidad (TLP) y trastorno por uso y abuso de sustancias (TUS) muestran una gran afectación emocional y peores resultados en el tratamiento psicológico. Objetivo: El objetivo fue examinar los tratamientos psicológicos útiles para las personas con TLP y TUS. Método: Se consultaron las bases de datos Cochrane Library, ISOC, Psychodoc, ProQuest Central, Pubmed, Web of Science y Scopus mediante una revisión bibliográfica sistemática siguiendo las normas PRISMA. Se obtuvieron 185 artículos, de los cuales se seleccionaron 12 teniendo en cuenta los criterios de inclusión. El proceso fue realizado por dos evaluadoras independientes y el nivel de acuerdo fue excelente. Resultados: existe una variedad de opciones terapéuticas que, en general, mejoran los síntomas asociados al TLP pero no al TUS. Conclusión: se necesita más investigación para evaluar la utilidad de las terapias psicológicas en estos pacientes.

6.
Med. clín. soc ; 5(3)dic. 2021.
Article in English | LILACS-Express | LILACS | ID: biblio-1386236

ABSTRACT

ABSTRACT Introduction: There may be a discordance between diagnoses at admission and discharge of mentally ill patients with major issues regarding their diagnostic stability. The objective of this brief report was to determine the diagnostic stability of major depressive disorder at patients' discharge and if the diagnosis of their hospital admission had been retained. Methodology: This was a pilot, descriptive, cross-sectional, and retrospective observational study. A non-probabilistic sampling of consecutive cases was used. We reviewed the medical records, at admission and discharge, of patients with an initial diagnosis of major depressive disorder, hospitalized in the Department of Psychiatry of the 'Hospital de Clínicas' of the National University of Asunción, Paraguay, during the months of October to December 2020. Results: Fifty-three patients with a diagnosis of major depression on their hospital admission were included in the study (mean age = 35.7 ± 16.5 years). 79.2 % were women, 52.8 % were single, and 37.7 % were from the Central province of Paraguay. The most frequent diagnosis at discharge was borderline personality disorder, in 35.8% of cases. Major depressive disorder was confirmed in 15.1% of cases. No significant relationship was found between any discharge diagnosis and sociodemographic data. Conclusion: The results of this study, although preliminary, described the trajectories of diagnoses in the Psychiatry Department of a University hospital, but confirmatory studies are needed.


RESUMEN Introducción: puede existir una discordancia entre los diagnósticos al ingreso y al alta de los pacientes con enfermedades mentales, con problemas importantes en cuanto a su estabilidad diagnóstica. El objetivo de este breve informe fue determinar la estabilidad diagnóstica del trastorno depresivo mayor al alta de los pacientes y si se había mantenido el diagnóstico de su ingreso hospitalario. Metodología: se trata de un estudio observacional piloto, descriptivo, transversal y retrospectivo. Se utilizó un muestreo no probabilístico de casos consecutivos. Se revisaron las historias clínicas, al ingreso y al alta, de los pacientes con diagnóstico inicial de trastorno depresivo mayor, hospitalizados en el Departamento de Psiquiatría del Hospital de Clínicas de la Universidad Nacional de Asunción, Paraguay, durante los meses de octubre a diciembre de 2020. Resultados: se incluyeron en el estudio 53 pacientes con diagnóstico de depresión mayor a su ingreso hospitalario (edad media = 35,7 ± 16,5 años). El 79,2 % eran mujeres, el 52,8 % eran solteros y el 37,7 % eran del Departamento Central del Paraguay. El diagnóstico más frecuente al alta fue el trastorno límite de la personalidad, en el 35,8% de los casos. El trastorno depresivo mayor se confirmó en el 15,1% de los casos. No se encontró relación significativa entre ningún diagnóstico al alta y los datos sociodemográficos. Conclusiones: los resultados de este estudio, aunque preliminares, describen las trayectorias de los diagnósticos en el Departamento de Psiquiatría de un hospital universitario, pero son necesarios estudios confirmatorios.

7.
Rev. chil. neuropsicol. (En línea) ; 15(1): 12-17, oct. 2020. graf
Article in Spanish | LILACS | ID: biblio-1353767

ABSTRACT

La rehabilitación neuropsicológica es una terapia que busca mejorar la independencia y autonomía en pacientes que presentan dificultades cognitivas. El objetivo de la investigación fue determinar la eficacia de un programa de rehabilitación neuropsicológica en una paciente con diagnóstico de trastorno neurocognitivo leve, tipo ejecutivo, asociado a trastorno límite de la personalidad, mediante el fortalecimiento de la atención y de los procesos ejecutivos implicados en la memoria, bajo los principios de sustitución y restitución. Los instrumentos para establecer línea base y para medir el efecto del tratamiento fueron la escala de trastornos de la memoria y la escala de criterios del trastorno límite de la personalidad (TLP) basados en el DSM-V; estos instrumentos se le aplicaron a la paciente y también a su informador para comparar los datos. Los resultados arrojaron una mejoría estadística en las puntuaciones de la escala de trastornos de la memoria y de la escala de criterios para el TLP-DSM-V; pasando de tener una puntuación en memoria de 36 en línea base a 16 después de la intervención, también pasó de tener 3 criterios para impulsividad a 1 criterio después de la intervención. Finalmente se establece la eficacia de la rehabilitación neuropsicológica en los pacientes con TLP, no solo se evidencia mejoría en los síntomas cognitivos asociados a las dificultades en la memoria, sino que también se muestra disminución en los síntomas psiquiátricos asociados con el control de los impulsos.


Neuropsychological rehabilitation is a therapy that seeks to improve independence and autonomy in patients with cognitive difficulties. The objective of the investigation was to determine the efficacy of a neuropsychological rehabilitation program in a patient diagnosed with a mild neurocognitive disorder, executive type, associated with borderline disorder personality, by strengthening attention and executive processes involved in memory, under the principles of substitution and restitution. The instruments to establish a baseline and to measure the effect of treatment were the memory disorders scale and the DSM-V-based borderline personality disorder (BPD) criteria scale; these instruments were applied to the patient and also to her informant to compare the data. The results showed a statistical improvement in the scores of the memory disorders scale and the criteria scale for the BPD-DSM-V; going from having a memory score of 36 at baseline to 16 after the intervention, it also went from having three criteria for impulsivity to one criterion after the intervention. Finally, the efficacy of neuropsychological rehabilitation in patients with BPD is established, not only is there an improvement in the cognitive symptoms associated with memory difficulties, but also a decrease in the psychiatric symptoms associated with impulse control.


Subject(s)
Humans , Female , Middle Aged , Borderline Personality Disorder/rehabilitation , Cognitive Dysfunction/rehabilitation , Borderline Personality Disorder/physiopathology , Treatment Outcome , Cognitive Dysfunction/physiopathology , Impulsive Behavior/physiology , Neuropsychology/methods
8.
Rev. mex. trastor. aliment ; 10(1): 109-120, Jan.-Jun. 2019. tab
Article in Spanish | LILACS-Express | LILACS | ID: biblio-1004322

ABSTRACT

Resumen Los estudios sobre comorbilidad entre los trastornos de la conducta alimentaria (TCA) y los trastornos de la personalidad reportan tasas del 20-80%, condición que dificulta el diagnóstico y ensombrece el pronóstico, especialmente respecto a su comorbilidad con el trastorno límite de la personalidad (TLP). El objetivo de este estudio fue valorar si las alteraciones patológicas de la personalidad permiten distinguir no solo entre distintos tipos de TCA, sino además en función de su comorbilidad con el TLP. Participaron 29 pacientes con TCA, 10 con TCA comórbido con TLP [TCAc], 27 con TLP y 22 controles sanas, quienes completaron el Inventario Clínico Multiaxial de Millon (MCMI-II) y otras dos medidas, una sobre impulsividad y otra dirigida a evaluar síntomas de bulimia nerviosa (BN). El grupo TCA se caracterizó por mayor compulsividad, principalmente el subgrupo con anorexia nerviosa vs. los grupos TLP y TCAc; no obstante, estos dos últimos compartieron un amplio número de rasgos indicativos de inestabilidad emocional, y también -aunque en menor medida− con el subgrupo con BN. Los hallazgos apoyan un continuum de gravedad en función de la compulsividad-impulsividad, con importantes implicaciones etiopatogénicas, diagnósticas y psicoterapéuticas.


Abstract Studies on comorbidity between eating disorders (ED) and personality disorders yield rates of 20-80%, a condition that makes difficult the diagnosis and complicates prognosis, especially regarding their comorbidity with borderline personality disorder (BPD). The objective of this study was to assess whether pathological personality alterations make it possible to distinguish not only between different types of ED, but also in terms of their comorbidity with BPD. Participants included 29 patients with ED, 10 with comorbid ED with BPD (EDc), 27 with BPD and 22 healthy controls, who completed the Millon Multiaxial Clinical Inventory (MCMI-II), and two other measures, one on impulsivity and other aimed at assess symptoms of bulimia nervosa (BN). The ED group was characterized by greater compulsivity, mainly in the subgroup with anorexia nervosa vs. BPD and EDc groups; however, these last two groups shared many features that show emotional instability, although less that the subgroup with BN. These findings support a continuum of severity in terms of compulsivity-impulsivity, with important etiopathogenic, diagnostic and psychotherapeutic implications.

9.
Salud ment ; 42(2): 83-90, Mar.-Apr. 2019. tab
Article in English | LILACS-Express | LILACS | ID: biblio-1014569

ABSTRACT

Abstract Introduction Informal Primary Caregivers (IPC) of people with borderline personality disorder (BPD) experience a significant burden, making it important to determine their specific needs. Objectives Cross-sectional study aimed at adapting and establishing the reliability of the Questionnaire on the Needs of Family Members of People with Severe Mental Disorders to identify felt and unfelt needs that may or may not have been met in IPCs of patients with BPD and suggest intervention strategies to effectively address them. Method The adapted version of the instrument was completed by 80 IPCs of patients with confirmed BPD diagnosis. Results Cronbach's alpha coefficients for different groups of needs evaluated through the instrument were: Knowledge/information = .77, Instrumental support = . 78, Participation = .63, and Personal support = .74; and for the total score = .86. The most important unmet felt needs were: 1. having information on interventions for patients and caregivers, legal and administrative aspects, and available support services; 2. having coping skills to deal with crises and manage patients' risk behaviors; 3. receiving professional care to reduce stress; and 4. being listened by health professionals, express their personal opinions, and need for rest. Conclusions The adapted instrument showed satisfactory internal consistency in IPCs of patients with BPD. The results highlight the urgent need for interventions for this population, focusing on psychoeducation, assertiveness training, stress management, and problem solving.


Resumen Introducción Los cuidadores primarios informales (CPI) de pacientes con trastorno límite de personalidad (TLP) soportan una pesada carga, por lo que es importante conocer sus necesidades específicas. Objetivos Estudio transversal dirigido a adaptar y determinar la confiabilidad del Cuestionario de Necesidades de Familiares de Personas con Trastornos Mentales Graves a fin de identificar las necesidades sentidas y no sentidas que han sido satisfechas o no en los CPI de pacientes con TLP y sugerir estrategias de intervención para que reciban una atención efectiva. Método Ochenta CPI de pacientes con diagnósticos confirmado de TLP completaron la versión adaptada del instrumento. Resultados Los coeficientes alpha de Cronbach para los cuatro grupos de necesidades evaluadas mediante el instrumento fueron: Conocimientos/información = .77, Apoyo instrumental = .78, Participación = .63, y Apoyo personal = .74; y para el total de la escala = .86. Las necesidades sentidas y no satisfechas que destacaron fueron: 1. tener información de intervenciones para el paciente y los cuidadores, aspectos legales y administrativos, y servicios disponibles para apoyarse; 2. contar con herramientas para afrontar crisis y manejar conductas de riesgo de los pacientes; 3. ser atendidos profesionalmente para reducir el estrés; y 4. ser escuchados por los profesionales de salud y tomados en cuenta en relación con sus opiniones personales y necesidad de descanso. Conclusiones El instrumento adaptado mostró una consistencia interna satisfactoria en CPI de pacientes con TLP. Los resultados resaltan la necesidad urgente de intervenciones para esta población, enfocadas en psicoeducación, entrenamiento asertivo, manejo del estrés ansiedad y solución de problemas.

10.
Salud ment ; 42(1): 33-42, Jan.-Feb. 2019. tab, graf
Article in English | LILACS-Express | LILACS | ID: biblio-1004648

ABSTRACT

Abstract Introduction Social cognition (SC) and executive function (EF) research in borderline personality disorder (BPD) has proven to be controversial and lack of sufficient information about deficit patterns. Objective Assess the contribution of SC and EF in the socio-emotional and cognitive patterns in BPD, as well as investigate the possible relationships between SC, EF, and clinic features in BPD. Method The study evaluated 20 females with BPD in ambulatory hospitalization and 20 healthy women in social cognition ("Reading the mind through the eyes" and the IOWA gambling task) and executive function (with the Wisconsin Card Sorting Test, verbal fluency tasks; digit spam test and numbers-and-letters of the WAIS-III, Trail Making Test Form A and B). Results The results show statistically-significant differences for the tasks evaluated in social cognition, the theory of mind (u: 181, p < .001**), and the IOWA gambling task, score IOWA 4 (p < .004*), and IOWA 5 p < .003*); and executive functioning, for example in the Wisconsin card sorting test, WCST1 were found (p < .003*), WCST2 (p < .004*), WCST3 (p < .018*) or WCST4 (p < .003*). Digit span test and verbal fluency had significant differences compared to controls. Discussion and conclusion The subdomains evaluated would be good endophenotypes as well as specific cognitive processes for research and rehabilitation.


Resumen Introducción La investigación sobre cognición social (SC) y funciones ejecutivas (EF) en el trastorno límite de la personalidad (TLP) ha arrojado datos controvertidos e insuficientes sobre los patrones de déficit. Objetivo Evaluar la contribución de SC y EF en los patrones cognitivos en el TLP, así como investigar las posibles relaciones entre SC, EF y las características clínicas del TLP. Método El estudio evaluó 20 mujeres con TLP en hospitalización ambulatoria y 20 mujeres sanas en cognición social ("Leer la mente a través de los ojos" y la tarea de apuestas IOWA) y función ejecutiva (con la Prueba de clasificación de tarjetas de Wisconsin, tareas de fluidez verbal; y números y letras del WAIS-III, formulario de prueba de Trail Making A y B). Resultados Se evidencian diferencias estadísticamente significativas en cognición social, la teoría de la mente (p < .001**) y la tarea de apuestas IOWA, puntúan IOWA 4 (p < .004 *) e IOWA 5 (p < .003*) y en funciones ejecutivas; por ejemplo, en la prueba de clasificación de tarjetas de Wisconsin, se encontraron WCST1 (p < .003*), WCST2 (p < .004*), WCST3 (p < .018*) o WCST4 (p < .003*). Además, la prueba de amplitud de dígitos o la fluidez verbal tuvieron diferencias significativas en comparación con los controles. Discusión y conclusión Los subdominios evaluados serían buenos endofenotipos, así como también procesos cognitivos específicos para investigación y rehabilitación.

11.
Psiquiatr. salud ment ; 34(3/4): 233-238, jul.-dic. 2017.
Article in Spanish | LILACS | ID: biblio-967568

ABSTRACT

El término Pseudoneurótico recogería el problema de la interface fenomenológica entre psicosis y neurosis. Acuñan este término para tratar de especificar un cuadro psicopatológico caracterizado por exhibir manifestaciones clínicas pan-neuróticas, pan-sexuales y pan-ansiosas, enmascarando síntomas de una real esquizofrenia. Los fenómenos psicóticos serían sutiles y breves y en ocasiones se sufriría de episodios psicóticos intensos diurnos o nocturnos tales como pesadillas que se continúan con alucinaciones. La esquizofrenia Pseudoneurótica, junto con los conceptos de demencia precoz atenuada, esquizofrenia latente, esquizofrenia ambulatoria, estructura de personalidad pre esquizofrénica y esquizofrenia límite, se reclutaron en la noción de personalidad límite.


The term Pseudoneurotic would pick up the problem of the phenomenological interface between psychosis and neurosis. This term was coined trying to specify a psychopathological disorder characterized by exhibiting pan-neurotic, pan-sexual and pan-anxious clinical manifestations, masking symptoms of a real schizophrenia. Pseudoneurotic schizophrenia, together with the concepts of attenuated early dementia, latent schizophrenia, ambulatory schizophrenia, preschizophrenic personality structure and borderline schizophrenia, were recruited into the notion of borderline personality.


Subject(s)
Humans , Male , Middle Aged , Schizophrenia/diagnosis , Borderline Personality Disorder/diagnosis , Neurotic Disorders/diagnosis , Schizotypal Personality Disorder
12.
In. Buenos Aires (Provincia). Ministerio de Salud. Subsecretaría de Determinantes Sociales de la Salud y la Enfermedad Física, Mental y de las Adicciones. Congreso Provincial de Salud Mental y Adicciones (1er: 2017 may. 11-13). La Plata, Buenos Aires. Ministerio de Salud;Tandil. Municipalidad, 20170000. p.[10].
Monography in Spanish | LILACS | ID: biblio-1047004

ABSTRACT

El presente trabajo abordara la comorbilidad entre el consumo problemático de sustancias y el trastorno límite de la personalidad. Por medio de una revisión bibliográfica desarrollara brevemente el Tratamiento Basado en la Mentalización y la Psicoterapia centrada en la transferencia como modos específicos de abordaje. Esto supone una nueva conceptualización de la personalidad, sus subestructuras y funciones que aparecen alteradas en el trastorno límite, tal es el caso de la función de mentalización. Describe las principales formas de apego patológico como principal contribución a la problemática del consumo problemático de sustancias. Desde hace décadas la psicoterapia centrada en la transferencia y el tratamiento basado en la mentalización han desarrollado nuevas estrategias y procedimientos para el abordaje del trastorno límite de la personalidad, su comorbilidad con el trastorno por abuso de sustancias permite su entrecruzamiento y lo vuelve una opción adecuada para el tratamiento de estos casos. El trastorno limítrofe de la personalidad (TLP) constituye uno de los trastornos de la personalidad (TP) más estudiados de todo el mundo (Kernberg & Michaels, 2009). Desde los 70' se ha producido una enorme cantidad de bibliografía al respecto, esto trajo como consecuencia el desarrollo de nuevas herramientas clínicas, tal es el caso de la Trasnference Focused Psychoterapy (Kernberg, et al 2008)(AU)


Subject(s)
Psychoanalysis , Borderline Personality Disorder , Substance-Related Disorders
13.
Hosp. Aeronáut. Cent ; 12(2): 125-32, 2017.
Article in Spanish | LILACS, BINACIS | ID: biblio-911007

ABSTRACT

Introducción: El trastorno de la personalidad (TLP) afecta al 1-2% de la población adulta y aproximadamente al 20% de los pacientes hospitalizados por causas psiquiátricas. La tasa de mortalidad por suicidio alcanza el 10%, y se destacan las conductas suicidas que alcanzan el 84% de los pacientes, siendo éstas muy prevalentes en la consultas en los servicios de emergencia. El tratamiento psicofarmacológico aplicado en estos pacientes es uno de los abordajes clínicos que más incertidumbre generan debido a la falta de protocolos terapéuticos que cubran todas las dimensiones centrales de la personalidad. Objetivos: El objetivo del presente artículo es realizar una revisión bibliográfica sobre la utilidad de antipsicóticos de segunda generación, estabilizadores del ánimo y antidepresivos para el tratamiento farmacológico aplicado a la clínica de pacientes con diagnóstico de trastorno límite de la personalidad, con especificación de la evidencia científica para cada grupo farmacológico. Material y Método: Revisión y comparación bibliográfica sobre el uso y utilización de 3 grupos psicofarmacológicos (antipsicóticos de segunda generación, estabilizadores del ánimo y antidepresivos)para el tratamiento de pacientes con diagnóstico de TLP, con especificación de los indicadores y resultados de trabajos de medicina basada en la evidencia. Resultados: Según la revisión sistemática en ensayos clínicos con antipsicóticos (primera y segunda generación), estabilizadores del estado de ánimo y antidepresivos se hallaron mayores beneficios con el uso de estabilizadores del estado de ánimo (topiramato, lamotrigina y valproato de sodio) y antipsicóticos de segunda generación (aripiprazol y olanzapina). La consistencia es baja ya que el tamaño muestral fue pequeño o fue realizado mediante reportes de casos. Asimismo, la duración de los estudios varió de 5 a 24 semanas (duración promedio 12 semanas) y analizaron datos de 1714 participantes, con muestras heterogéneas en los estudios (entre 16 y 314 participantes).Conclusión: Suponemos que se debería profundizar en el abordaje de los síntomas borderline, básicamente investigaciones longitudinales a largo plazo (superior al año) con mayor número de pacientes, instrumentos de evaluación validados y tener en cuenta diseños para la traslación de resultados en contexto asistencial


Introduction: Personality disorder affects 1-2% of adult population and almost 20% of hospitalized patients for psychiatric causes. Mortality rate by suicide is almost 10%, and suicidal behaviour stand out in 84% of patients, being very prevalent in emergency service. Psicopharmacologic treatment applied to those patients is one of the approaches that more uncertainty generates because of the absence of therapeutic protocols that cover all the central dimensions of the personality. Objectives: to make a bibliographic review about second generation antipsychotics utility, mood stabilizers and antidepressants applied to patients with diagnosis of borderline personality disorder, with scientific evidence specification for each pharmacological group. Material and Method: Bibliographic review and comparison about use and utilization of three psicopharmacologic groups (second generation antipsychotics, mood stabilizers and antidepressant) for patients with borderline personality disorder treatment, with indicators specification and evidence-based medicine works results. Results: According to systematic review in clinical essays with antipsychotics (first and second generation), mood stabilizers and antidepressants, it was found more benefits with mood stabilizers (topiramate, lamotrigine and sodium valproate) and second generation antipsychotics (aripiprazole and olanzapine). The consistency is low because of the sample size or it was made with cases reports. Likewise, studies duration were between 5 and 24 weeks (average duration: 12 weeks) and 1714 data patients ́ were analysed, with heterogeneous sample (between 16 and 314). Conclusions: We assume we should deepen in borderline symptoms average with long term longitudinal studies (more than a year) with a bigger number of patients, validated evaluation instruments and take into account designs for results translation in an assistance context.


Subject(s)
Antipsychotic Agents/therapeutic use , Borderline Personality Disorder/drug therapy , Borderline Personality Disorder/therapy , Antidepressive Agents/therapeutic use , Antipsychotic Agents/pharmacology , Evidence-Based Medicine , Antidepressive Agents/pharmacology
14.
Psicol. rev. (Belo Horizonte) ; 22(3): 579-595, dez. 2016.
Article in Portuguese | LILACS | ID: biblio-955815

ABSTRACT

A relação terapêutica tem sido destacada como um dos principais fatores relativos a regulação emocional em pacientes com Transtorno da Personalidade Borderline (TPB). A Terapia Comportamental Dialética (TCD) coloca a relação terapêutica como um de seus pilares terapêuticos devido ao uso da relação como forma de persuasão e modificação de comportamentos desadaptadivos. Diversos estudos têm indicado que esta tem sido uma abordagem eficaz no tratamento do TPB e atualmente é o tratamento de primeira linha de escolha. Este estudo tem como objetivo explorar a relação terapêutica com pacientes borderlines na TCD por meio de uma revisão de literatura. Foram observados fatores essenciais da relação terapêutica como a empatia, proteção, cuidado, flexibilidade, versatilidade, congruência e compromisso. Embora esses fatores devam estar presentes em toda relação terapêutica, no TPB requerem atenção especial. A TCD demonstra articular os fatores da relação terapêutica de modo a contribuir para um maior engajamento do paciente no tratamento


The therapeutic relationship has been highlighted as one of the main factors related to emotional regulation in patients with Borderline Personality Disorder (BPD). The Dialectical Behavior Therapy (DBT) sets the therapeutic relationship as one of its therapeutic pillars due to the use of the relationship as a means of persuasion and change maladaptive behavior. Several studies have indicated that this has been an effective approach in the treatment of BPD and is currently the first-line treatment of choice. This study aims to explore the therapeutic relationship with borderline patients in TCD through a literature reviewed. Observing essential factors of the therapeutic relationship such as empathy, protection, care, flexibility, versatility, consistency and commitment. While these factors must be present in every therapeutic relationship, the TPB require special attention. The TCD demonstrates articulate the factors of the therapeutic relationship in order to contribute to greater patient engagement in treatment


La relación terapéutica se ha destacado como uno de los principales factores relacionados con la regulación emocional en los pacientes con trastorno de personalidad borderline (TPB). La terapia dialéctica conductual (TDC) pone la relación terapéutica como uno de sus pilares terapéuticos debido a la utilización de la relación como medio de persuasión y modificación de comportamientos inadaptados. Varios estudios han indicado que éste ha sido un enfoque eficaz en el tratamiento del TPB y actualmente es el tratamiento de primera línea de elección. Este estudio tiene como objetivo explorar la relación terapéutica con los pacientes borderline na TDC a través de una revisión de la literatura. Se observaron factores esenciales de la relación terapéutica como la empatía, la protección, el cuidado, la flexibilidad, versatilidad, congruencia y compromiso. Si bien estos factores deben estar presentes en toda relación terapéutica, en el TPB requiere una atención especial. La TDC demuestra articular los factores de la relación terapéutica con el fin de contribuir a una mayor participación del paciente en el tratamiento


Subject(s)
Borderline Personality Disorder , Behavior Therapy , Empathy
15.
Psicol. rev. (Belo Horizonte) ; 21(1): 87-107, jan. 2015. tab
Article in Portuguese | LILACS | ID: lil-791787

ABSTRACT

O transtorno da personalidade borderline (TPB) é o mais prevalente dentre todos os transtornos da personalidade, apresentando um percentual de 5,9% na população geral. O transtorno tem um impacto enorme na vida dos sujeitos, por isso a comunidade científica está voltada a estudar elementos relacionados a essa psicopatologia. Tendo isso em vista, os objetivos deste artigo foram: investigar a presença de sintomatologia pós-traumática e o histórico de trauma na infância em sujeitos com TPB. Para isso, foi realizado um estudo transversal, de caráter exploratório. Dessa forma, 22 sujeitos com diagnóstico de TPB preencheram um instrumento de rastreio para avaliar sintomas de TEPT. Foi encontrado que os pacientes com TPB apresentam diversos sintomas de TEPT, como dificuldade de concentração, lembranças intrusivas, tensão ao relembrar e evitação de lembranças.


The borderline personality disorder (BPD) is the most prevalent of all diagnostic personality disorders, presenting a percentage of 5.9% in the general population. The disorder has a huge impact in the life of the individuals, for this reason the scientific community is studying the relation elements of this psychopathology. The study’s purpose was to investigate the presence of posttraumatic symptomatology and history of childhood trauma. The work’s delineation was a transversal study with exploratory character. For these 22 borderline patients completed a screening task in order to evaluate symptoms of PTSD. It was found that the borderline patients presented several symptoms of PTSD, such as: difficulty in concentration, intrusive memories, tension in remembering and avoidance of memories.


El trastorno límite de la personalidad (TLP) es el más frecuente entre todos los trastornos de la personalidad, presentando un porcentaje de 5,9% en la población general. El trastorno tiene un gran impacto en la vida de los individuos, es por esto que la comunidad científica está dedicada a estudiar elementos relacionados con esta psicopatología. Considerando esto, los objetivos del presente artículo fueron: investigar la presencia de sintomatología post-traumática y el historial de trauma en la infancia de personas con TLP. Para esto, se realizó un estudio transversal con carácter exploratorio. De esa manera, 22 personas con TLP respondieron un formulario de acompañamiento para evaluar los síntomas de TEPT. Se encontró que los pacientes con TLP tienen muchos síntomas de TEPT, tales como: dificultad para concentrarse, recuerdos intrusivos, tensión al recordar y evitar recuerdos.


Subject(s)
Humans , Male , Female , Adult , Middle Aged , Personality Disorders/psychology , Stress Disorders, Post-Traumatic/psychology , Borderline Personality Disorder/diagnosis , Borderline Personality Disorder/psychology , Child Abuse/psychology
16.
Psicol. teor. prát ; 15(3): 19-33, dez. 2013.
Article in Portuguese | LILACS | ID: lil-717635

ABSTRACT

O presente trabalho versa a temática da personalidade borderline traduzida na vivência de uma jovem, em que está patente uma agitação interna e passagem ao acto sob forma de automutilação. A avaliação realizada expressa uma fragmentação do Eu e a ineficácia de utilização de mecanismos de defesa, marcada por uma personalidade frágil, imatura e com pouco controlo de impulsos. Trata-se de um trabalho desenvolvido no âmbito da consulta psicológica do Serviço de Psicologia do Hospital de Magalhães Lemos. É proposta uma intervenção psicológica no sentido de clarificar, organizar e transformar os elementos internos em elementos pensáveis, sugerindo a necessidade de mudança de um comportamento reactivo singular e permanente. O resultado do processo de acompanhamento psicológico, concebido no modelo psicodinâmico, surtiu um efeito estruturante, levando a uma maior discriminação entre fantasia e realidade, demonstrando, ainda que de forma prematura, uma maior capacidade para pensar e elaborar os sentimentos e emoções.


This case study refers to the borderline personality theme shown through the life experience of a young adult woman who demonstrates inner instability and the passage to action through self-mutilation. The evaluation reveals self-fragmentation and inefficiency in the use of defense mechanisms, shown by a fragile and immature personality with low impulse control. This study was developed within the psychology consultations in the Psychology Department of Hospital Magalhães Lemos. Psychological intervention is recommended in order to clarify, organize and transform the internal elements into thinkable elements, suggesting the need for change of a singular reactive and permanent behavior. The result of the psychological counseling process, designed under the psychodynamic model, had a structuring effect, leading to a better discernment between fantasy and reality, demonstrating, even if prematurely, a greater capacity to think and produce feelings and emotions.


Este estudio aborda el tema de la personalidad borderline traduciendo la experiencia de una joven, en la que queda patente la agitación interna y el pasaje al acto en forma de auto-mutilación. La evaluación expresa la fragmentación del yo y la ineficiencia del uso de mecanismos de defensa, marcado por una personalidad frágil, inmadura y con poco control de los impulsos. Este es un trabajo desarrollado en el ámbito de la consulta psicológica del Servicio de Psicología del Hospital de Magalhães Lemos. La intervención psicológica propuesta tuvo como objetivo clarificar, organizar y transformar los elementos internos en elementos pensables, sugiriendo la necesidad de un cambio, de la conducta reactiva singular y permanente. El resultado del proceso de consulta psicológica, diseñado en el modelo psicoanalítico, ha tenido un efecto estructural, llevando a una mayor discriminación entre la fantasía y la realidad, lo que demuestra, aunque de forma prematura, una mayor capacidad para pensar y desdoblar sus sentimientos y emociones.

17.
Psicofarmacologia (B. Aires) ; 11(67): 29-45, abr. 2011. tab
Article in Spanish | LILACS | ID: lil-614205

ABSTRACT

El manejo de los pacientes con TLP es complejo debido a la falta de consenso y a las diferentes estrategias de abordaje terapéutico posibles. Se realiza una revisión de la literatura médica sobre tratamientos farmacológicos del trastorno límite de personalidad poniendo énfasis en el problema del daño autoinfligido deliberado, con el consecuente riesgo suicida, propio de este grupo. El trastorno límite de personalidad es un problema grave de salud pública, se asocia con altos niveles de utilización de servicios de salud mental, un importante grado de deterioro psicosocial y una alta tasa de suicidio.Se exponen las bases biológicas, las intervenciones psicoterapéuticas así como también el manejo clínico y el papel de la hospitalización en pacientes de riesgo.


Managing BPD patients is complex, given the lack of consensus and the different possible therapeutic strategies of approach. The author provides a review of the medical literature on pharmacological treatments of borderline personality disorder, laying emphasis on the issue of deliberate self-inflicted damage and its subsequent suicide risk, which is common to this group. Borderline personality disorder is a serious issue pertaining public health that is associated with high levels of use of mental health services, a significant level of psychosocial deterioration and a high suicide rate. The author describes biological foundations, psychotherapeutic interventions, as well as the clinical management and the role of hospitalization among patients at risk.


Subject(s)
Humans , Amygdala/pathology , Drug Synergism , Suicide, Attempted/psychology , Psychoanalytic Therapy , Borderline Personality Disorder/drug therapy , Borderline Personality Disorder/therapy
18.
Salud ment ; 33(6): 517-526, nov.-dic. 2010. ilus, tab
Article in English | LILACS-Express | LILACS | ID: lil-632811

ABSTRACT

Otto Kernberg states three types of personality organizations, also named psychological functional levels. They reflect the patient's predominant psychological characteristics: identity integration grade, defense mechanisms, and reality test. In mental disorders, the predominant defensive influences significantly in the severity and evolution of the suffering. Objectives The objective of the actual study was to determine the usage of defense mechanisms by patients with some mental disorder, grouping them according to personality organization levels or psychological functioning and the DSM-IV-TR Axis II diagnostic. Sample The sample included two groups: a) 1 02 hospitalized patients in the Instituto Nacional de Psiquiatría, 20 males and 82 females. b) A control group formed by 125 individuals, 48 males and 77 females; in all cases, they lived in Distrito Federal or Estado de México. Method The sample of this study was evaluated with the Defensive Questionnaire (DSQ-40) and the Personality Diagnostic Questionnaire (PDQ-4 + ); both instruments were applied as soon as patients were admitted to the hospital. The concepts of borderline psychological functioning and borderline personality disorder make reference to: The levels of personality organization or borderline psychological functioning characterized by an identity integration failure named identity diffusion, habitually reality judgment conserving and low level defenses supported on the splitting. b) The patients that were diagnosed with borderline personality disorder in agreement with the DSM-IV-TR. According to the personality organization, the psychotic disorders were grouped in the psychotic functioning level; the rest of the patients that suffered some anxiety or mood disorders were included in the borderline functioning level when they had also a diagnosis of borderline, narcissistic, antisocial, paranoid, schizoid, schizotypal, avoidant, dependent or histrionic personality disorder; in the neurotic functioning level those patients without personality disorder. The members of the control group were included in different academic level, labor and social scopes during the same period. Results The patients with a low level of personality organization (psychotic or borderline personality organization) used predominantly the immature or primitive defense mechanisms; patients with a high level of personality organization (neurotic level of psychological functioning) and members of the control group used predominantly mature or advanced defense mechanisms. Derived from the factorial analysis, three levels of defensive were determined: mature/advanced, neurotic and immature/primitive. In the mature/advanced defensive, the members of the control group were those that scored higher, followed by the psychotic patients and borderline. The scores of the neurotic defensive were higher in the borderline and psychotic groups than the control group. In the immature/primitive defensive, the borderline patients had higher scores than the psychotic and control group. The patients that were diagnosed through the PDQ-4+ with borderline personality disorder in agreement with the DSM-IV-TR had lower scores in the mature/advance defensive and higher than the control group in neurotic and immature/primitive defensive . The characteristics of personality of clusters A and B correlated positively with the following defensive s: immature/ primitive and neurotic and negatively with the mature/advanced defensive . The relation between the defensive s and the characteristics of personality of cluster C was negative in the defensive mature/advanced and positive in the neurotic and immature/ primitive. Conclusions: Through these findings a hierarchy between the levels of psychological functioning can be established, so that the lower the level of psychological functioning (borderline or psychotic), the higher is the use of immature mechanisms of defense and vice versa. The level of high psychological functioning (neurotic) used mature mechanisms of defense mainly; the borderline and psychotic levels of psychological functioning had major use of immature defenses, such as projection and autistic fantasy.


Los mecanismos de defensa son los elementos fundamentales de la organización de la personalidad, junto con la constancia objetal y el juicio de realidad. En los trastornos mentales, el estilo defensivo predominante influye significativamente en la gravedad y evolución del padecimiento. Objetivos El objetivo de este estudio fue determinar la relación existente entre los mecanismos de defensa, los trastornos de la personalidad y los niveles de funcionamiento psicológico (organización de la personalidad tipo neurótica, límite o psicótica) propuestos por Kernberg. Muestra La muestra del estudio estuvo constituida por dos grupos: a) Un grupo de 102 pacientes psiquiátricos hospitalizados, 20 del sexo masculino y 82 del femenino, provenientes del Instituto Nacional de Psiquiatría Ramón de la Fuente. b) Un grupo control, constituido por 1 25 sujetos, 48 hombres y 77 mujeres, en su mayoría residentes del Distrito Federal o del Estado de México. Método La población de este estudio fue evaluada con el Cuestionario de Estilos Defensivos (DSQ-40) y el Cuestionario Diagnóstico de la Personalidad (PDQ-4 + ) para determinar el uso de los mecanismos de defensa y detectar los trastornos de la personalidad, respectivamente. A los pacientes se les aplicaron ambos instrumentos al momento de su ingreso y se les agrupó en alguno de los tres niveles de funcionamiento psicológico de Kernberg. Los conceptos nivel de funcionamiento psicológico límite y trastorno límite de la personalidad hacen referencia a: a) La organización de la personalidad o nivel de funcionamiento límite caracterizada por la difusión de identidad, habitualmente conservación de la prueba de realidad y mecanismos de defensa basados en la escisión. b) El trastorno límite de la personalidad descrito por la Asociación Psiquiátrica Americana en el DSM-IV-TR. De acuerdo con la organización de la personalidad, los pacientes esquizofrénicos y con otras psicosis quedaron en el nivel de funcionamiento psicótico. Los pacientes que sufrían algún trastorno de ansiedad o del estado de ánimo se incluyeron en el nivel de funcionamiento límite o borderline cuando también tenían diagnóstico de trastornos de personalidad límite, narcisista, antisocial, paranoide, esquizoide, esquizotípico, evitativo, dependiente e histriónico; en el nivel de funcionamiento neurótico se incluyeron los pacientes con los trastornos mencionados, que no tenían trastorno de personalidad o bien cuyo diagnóstico fue de trastorno obsesivo-compulsivo de la personalidad. Los sujetos que sirvieron como controles fueron captados en distintos ámbitos escolares, laborales y sociales durante el mismo periodo. Resultados Los pacientes pertenecientes a los niveles de funcionamiento psicológico menores (psicótico o límite) usaron más los mecanismos de defensa inmaduros en comparación con los pertenecientes al nivel de funcionamiento psicológico de mayor nivel (neurótico) y que los sujetos controles. Se determinaron tres estilos defensivos: maduro/ avanzado, neurótico e inmaduro/primitivo. En el estilo maduro/ avanzado los sujetos del grupo control fueron los que puntuaron más alto, seguidos de los pacientes con nivel de funcionamiento psicológico psicótico y límite. Las puntuaciones del estilo defensivo neurótico fueron mayores en los grupos límite y psicótico que en el grupo control. En el estilo defensivo inmaduro/primitivo, los pacientes límites tuvieron puntuaciones mayores que los grupos psicótico y control. El grupo control puntuó más alto que el límite en sublimación, humor, anticipación y supresión, y que el psicótico en humor y supresión. El grupo de funcionamiento límite tuvo puntuaciones mayores que el grupo control en anulación, aislamiento, racionalización, proyección, agresión pasiva, exoactuación, fantasía autista, escisión y somatización. En cambio, puntuaron más alto que el grupo psicótico en supresión, agresión pasiva y somatización. El grupo psicótico tuvo puntuaciones mayores que el grupo límite en sublimación, anticipación y formación reactiva, y que el grupo control en anulación, desplazamiento, proyección y fantasía autista. Los pacientes diagnosticados a través del PDQ-4+ con trastorno límite de personalidad de acuerdo con el DSM-IV-TR tuvieron puntuaciones menores en el estilo defensivo maduro/avanzado que el grupo control pero mayores en los estilos defensivos neurótico e inmaduro/ primitivo. En el análisis individual de cada mecanismo de defensa se encontró que el grupo control tuvo mayores puntuaciones en sublimación, humor, anticipación, supresión y disociación que el grupo de pacientes con trastorno límite de la personalidad. Éstos puntuaron más alto en desplazamiento, racionalización, aislamiento, proyección, escisión, exoactuación, agresión pasiva, devaluación, fantasía autista, negación y somatización. Cuando se determinó el uso de las defensas de acuerdo con el diagnóstico de trastornos de la personalidad pertenecientes a los clusters A y B, se observó un mayor uso de los mecanismos de defensa basados en la escisión; de éstos, la fantasía autista fue la que tuvo mayor valor predictivo. Por el contrario, los trastornos de la personalidad del cluster C estuvieron asociados a los mecanismos de defensa de la esfera de la represión. Conclusiones Los resultados dan sustento empírico a la organización de la personalidad propuesta por Kernberg sobre los tres niveles de funcionamiento psicológico y a la vez demuestran la relación entre los trastornos de la personalidad y los mecanismos de defensa. El mecanismo de defensa denominado fantasía autista resultó ser un factor explicativo y predictivo de las características de la personalidad de los clusters A y B y del trastorno límite de la personalidad, en específico.

19.
Salud ment ; 32(4): 317-325, jul.-ago. 2009. tab
Article in Spanish | LILACS-Express | LILACS | ID: lil-632681

ABSTRACT

Suicide attempt in patients diagnosed with Borderline Personality Disorder (BPD) is the most frequent cause of hospitalization in this clinical category and suicidal risks are usually the first manifestation of such disorder. Patients frequently relapse, thus generating high personal and family costs, including: treatments, hospitalization, medication, work disability in economically active people and even death. The American Psychiatric Association, through the DSM-IV, defines the Borderline Personality Disorder as <>. More specifically, criterion five of the disorder mentions self-mutilating behavior, threats, and recurrent suicidal behavior. DSM-IV reports that 8-10% of borderline patients commit suicide. In our country, however, there are no specific data about people diagnosed with BPD who actually have commited suicide. Prevalence of BPD among the general population ranks from 1 to 2%, from 11 to 20% of the psychiatric population; representing 20% of hospitalized patients. The gender distribution is 3:1, being more frequent among women than men. The objective of this study is the assessment of suicidal risk and lethality of 15 patients diagnosed with Borderline Personality Disorder. This research was conducted at the doctors' offices of the host institution, where 1.39% of a total of 1151 hospitalized patients in 2007 were diagnosed with BPD. The comorbidity of DSM-IV Axis I and BPD is frequent and can be found together with mood disorders (depression, dysthymia), substance-related disorders, eating disorders (bulimia nervosa), post-traumatic stress disorder, anxiety disorder and/or attention-deficit hyperactivity disorder. A research conducted in the USA with 504 patients diagnosed with BPD showed that 93% (n = 379) of the patients showed comorbidity of DSM-IV Axis I and mood disorders. Similar results were reported by other researchers. This study was designed to be a descriptive and transversal study. We went through the records of all the adult patients who had been hospitalized due to suicide ideation or attempt, diagnosed by psychiatrists as Borderline Personality Disorder, and confirmed by the SCID-II, and medicated by a psychiatrist. Selection criteria: 18 year-old patients or older, hospitalized due to suicide attempt or ideation, and diagnosed with BPD. The research was conducted in compliance with the regulations governing human research ethics set forth in the Declaration of Helsinki (1975). The instruments used were: the medical history of the patients, the ID file for clinical and epidemiological studies, the Structured Clinical Interview for DSM-IV Axis II Personality Disorders (SCID -II), the Hopelessness Scale, the Depressive Syndrome Questionnaire, the Suicidal Ideation Scale, the Risk-Rescue Scale and some risk factors such as: sexual abuse, separation from partner, parental divorce, the suicide of a close relative, and alcohol and substance abuse. The results on the lethality of suicide attempts are similar to the results of other studies: women show a higher number of less lethal suicide attempts, and the methods used are also similar (medication intoxication and mutilation). The comorbidity with depressive disorders was of 86.6%, thus our results concur with those of other studies. Regarding risk factors, 86.6% (n = 13) mentioned they have experienced some type of sexual abuse, 46.6% (n = 7) separated from their partner, 40% (n = 6) had divorced parents, and 6.6% (n = 1) had a close relative who had committed suicide. During their last suicide attempt, one of the subjects had consumed alcohol and none of them had taken drugs; however, these behaviors did not appear to potentiate the suicidal risk. According to the scales applied, 46% of the subjects (n = 7) showed severe hopelessness, while 54% (n = 8) ranged between mild or moderate hopelessness; 13% (n = 2) had severe depression according to Calderon's scale. According to the Suicidal Ideation Scale, 93.3% (n=14) had a >10 score, which means patients show risk of attempting suicide again. The Risk-Rescue Scale suggests that most patients (n = 13) exhibited deliberate self-harming behavior (e.g. cutting superficially the skin around the wrist, taking prescription drugs or intoxicating near key people who could rescue them or provide help and rescue), which are not considered true parasuicidal behavior. The literature shows that BPD is the most prevalent of all personality disorders, both in the general and clinical population, the one with the highest number of suicide attempts in the DSM-IV Axis II, and the one with the highest comorbidity with Axis I mood disorders and Axis II personality disorders. The 15 patients in this sample carried out a total of 128 suicide attempts throughout their lives, which coincides with other research results, which describe that a history of multiple suicide attempts is a predictor of future suicidal behavior and increase the suicidal risk. As shown above, there were no cases obtaining high scores in all the scales applied (hopelessness, depression, suicidal ideation, high risk and low rescue), even in the result integration per subject, thus showing very few, high-lethality suicidal cases. It would be a mistake, however, to think that suicide attempts will always be less lethal, since there is always the risk of someone attempting a more lethal suicide that translates into the death of the patient. Suicide attempt assessment in dealing with Borderline Personality Disorder becomes a necessary condition to design better therapeutic strategies, since it allows health professionals to know the degree of lethality and timely treatment. The assessment of suicide attempts enables a more realistic prognosis, which backs up and guides clinical decisions.


El intento de suicidio en los pacientes diagnosticados con Trastorno Límite de la Personalidad (TLP) es la causa más frecuente de hospitalización en esta categoría clínica, los riesgos suicidas constituyen con frecuencia la presentación del padecimiento. Los pacientes recaen continuamente generando altos costos personales-familiares, de hospitalización en tratamientos, medicación e incapacidades laborales en personas económicamente activas, siendo el costo más alto, la pérdida de la vida humana. La Asociación Psiquiátrica Americana, en el Manual del DSM-IV, define el trastorno límite de la personalidad como: <>. El DSM-IV reporta que del 8 al 10% de los pacientes fronterizos llegan a consumar el acto suicida. La prevalencia del TLP en población general va de 1 al 2%, de 11 al 20% en población clínica psiquiátrica, representa 20% de los hospitalizados y desde el punto de vista de la distribución por sexos, es más frecuente entre las mujeres de 3:1 con respecto a los varones. El objetivo de esta investigación consistió en la evaluación del riesgo y la letalidad suicida, en pacientes diagnosticados con trastorno límite de la personalidad, en un hospital de psiquiatría del Valle de México, por medio de: la historia clínica, la ficha de identificación para estudios clínicos y epidemiológicos, la Entrevista Clínica Estructurada para los Trastornos de la Personalidad SCID-II, la Escala de Desesperanza, el Cuestionario del Síndrome Depresivo, la Escala de Ideación Suicida, la Escala de Riesgo-Rescate y algunos factores de riesgo, tales como el abuso sexual, la separación de la pareja, el divorcio de los padres, el suicidio de algún familiar cercano, el abuso de sustancias y alcohol. El diseño de este estudio fue descriptivo y transversal. Los resultados mostraron que la comorbilidad con los trastornos depresivos fue del 86.6%, esto concuerda con otras investigaciones. La letalidad del intento suicida coincide con los resultados de otras investigaciones en cuanto a que las mujeres presentan mayor número de tentativas suicidas de menor letalidad. La escala de Riesgo-Rescate sugiere que la mayoría de los casos (n = 13) realizó conductas de automutilación, ej., cortarse la piel superficialmente a la altura de la muñeca, ingerir medicamentos o intoxicarse en presencia de personas-clave que estaban en posibilidad de rescatarlas o solicitar el rescate. Con relación a los factores de riesgo, el 86.6% (n = 13) respondió haber vivido algún tipo de abuso sexual, 46.6% (n = 7) separación de la pareja, 40% (n = 6) padres divorciados, y 6.6% (n = 1) suicidio de algún familiar cercano. El consumo de alcohol y drogas no potencializaron el riesgo suicida. Conclusiones Los métodos más utilizados en pacientes con TLP fueron el uso de fármacos y la mutilación de la piel de manera superficial en las muñecas. La letalidad de los intentos de suicidio en general fue baja. Las conductas de riesgo suicida en TLP como el consumo del alcohol y drogas, el abuso sexual, la separación de la pareja, los padres divorciados, el suicidio de algún familiar cercano, no incrementaron la gravedad suicida en la mayoría de los casos, por lo que se puede hablar de intentos de suicidio, y no de suicidios frustrados o verdaderos comportamientos que comprometan la vida. La evaluación del intento de suicido en el trastorno límite de la personalidad, es una condición necesaria para diseñar mejores estrategias terapéuticas y con ello reducir el riesgo suicida.

20.
Salud ment ; 32(3): 241-249, may.-jun. 2009. tab
Article in Spanish | LILACS-Express | LILACS | ID: lil-632648

ABSTRACT

Nowadays, psychotherapy is regarded as the treatment of choice for patients with Borderline Personality Disorder(BPD). A consensus has yet to be reached, however, despite various controlled studies undertaken to determine the most suitable form of treatment. At both public and private mental health institutions, there is a growing number of BPD patients seeking treatment. These patients pose a challenge for institutional programs because their demands usually exceed the <> of conventional forms of psychiatric treatment. Due to this heavy demand, various strategies have been examined in order to treat this type of patients properly. These include short group therapy. This article presents the results of a controlled clinical study comparing the effectiveness of treatment according to the composition of the groups: a homogeneous group, consisting solely of borderline patients and another in which only half had been diagnosed with BPD while the others only had Axis 1 disorders, with no serious personality pathology. The study considered the variables of psychiatric symptomatology, quality of life, self-esteem, <>, perceived social support, social adjustment and inter-personal problems. Both groups contained female subjects only. The quantitative results of the mixed group show significant changes in the psychiatric symptoms as well as the evolution of interpersonal problems and current quality of life. At the same time, the homogeneous group showed changes in the ideal quality of life and the self-esteem scale. A comparison of the base and final scores showed that the BPD group showed no reduction in psychiatric symptomatology, nor was there a positive evolution in inter-personal relations. At the same time, when other groups were compared, it was obvious that patients in the mixed group showed greater changes in interpersonal problems and depression, anxiety, paranoid and hostility symptoms. As for qualitative results, the BPD group constituted a failed experience from the psychotherapeutic point of view. An analysis of the development of the process in the BPD group reveals three different stages. The first was characterized by the early emergence of numerous transfers based on the idealization/devaluation of colleagues and therapists. The splitting mechanism was clearly observed. This stage saw the emergence of high expectations of a <> In Bion's terms, the group was experiencing a moment of dependency. At that point, the issue of sexuality emerged, triggering an apparent process of identification linked to experiences of early sexual abuse among patients. The bases of incipient group cohesion seemed to be emerging. Nevertheless, <> began to take place, together with the need to exclude the <> group member. Group members subsequently began to complain to the therapists about their <> and the fact that they failed to provide <> Negative transference became obvious, with hatred and suspicion prevailing. This stage may correspond to the process described by Bion as the attack and flight phase, characterized by intensely paranoid attitudes. The prevailing links were based on hatred, with nearly all expressions of love being stifled. The group eventually succumbed due to the spread of hostility triggered by the attacks of patients that participated in destructive alliances. This prevented the group from achieving cohesion and the stage of camaraderie, characterized by Bion as the emergence of loving feelings that usually neutralize hostile components. Two patients in this group, however, showed favorable changes in their attitudes that implied a process of elaborating conflicts primarily derived from feelings of dependence, passivity and anger in relation to parental figures. From the start, patients in the mixed group with and without BPD showed different degrees of participation. Patients with severe personality pathology participated less in the initial sessions, acting as spectators. They gradually joined the group and participated more actively. Patients without BPD, however, took the initiative regarding the issues to be dealt with during the sessions. In our view, this helped establish a <> for borderline patients. Later on, these patients' conflicts became more obvious, being characterized by powerful ambivalence and the activation of primitive defense mechanisms, such as splitting, projective identification and denial. These expressions, however, found a cohesive group that provided them with acceptance and contention. This group evolved like other psycho-therapeutic groups of <> but with differences due to the problems commonly expressed by patients with BPD: suicidal ideation, sexual abuse, severe conflicts in their relationships with their partners, etc. Nevertheless, due to the atmosphere of camaraderie established, these patients were fully integrated, and in fact, their colleagues were unable to determine which ones belonged to which category. By the end of the treatment, group cohesion and positive dominant transference were obvious. The experience yielded by this study showed that in a psycho-therapeutic group solely comprising BPD patients, situations arise that are extremely difficult to handle. The most important factor was negative transference, which created a hostile atmosphere that neutralized the psychotherapeutic interventions. This generalization should be viewed with caution, however, due to the small number of patients included in this study. The severity of the psycho pathology of the patients included in each group was probably not the same. A propos of this last mechanism, it has been suggested that certain socio-demographic characteristics are associated with better social functioning. The homogeneous group contained more unemployed and single patients and/or patients with highly conflictive interpersonal relations. From the outset, patients in the mixed group displayed higher levels of social performance. Despite the fact that they all met the diagnostic characteristics for BPD according to the SCID-II, a more detailed personality study that would reveal significant differences in the patients' psychic structure was not carried out. A retrospective analysis showed that histrionic, narcissistic and anti-social traits predominated in the homogeneous group; these traits may be included in the category of the malignant narcissistic syndrome described by Kernberg, in which the combination of these three traits produces a poor therapeutic prognosis. It has been established that these subjects tend to develop paranoid transferences and are unable to relate to others due to their inability to invest them with libidinal energy. At the same time, in the mixed group, borderline patients have phobic, dependent features, characteristics associated with a better prognosis, since better functioning is associated with a less primitive psychic structure and the capacity to establish less chaotic relationships. In any case, it seems quite clear that group therapy that combines a restricted number of borderline patients and subjects with Axis I disorders without serious personality disorders could prove a viable option in the search for institutional strategies for the psychotherapeutic treatment of patients with BPD.


En la actualidad se acepta que el tratamiento de elección para los pacientes con Trastorno Límite de la Personalidad (TLP) es la psicoterapia. Sin embargo, a pesar de los diversos estudios controlados que se han realizado con el propósito de determinar cuál es la modalidad de tratamiento más adecuada, no se ha logrado alcanzar consenso. En las instituciones de atención a la salud mental, tanto públicas como privadas, es creciente el volumen de pacientes con TLP que buscan tratamiento. Debido a estas fuertes demandas que operan sobre las instituciones, se han buscado diferentes estrategias para tratar adecuadamente a este tipo de pacientes. Entre ellas se destaca la terapia de grupo breve. La mayoría de los estudios que han respaldado los tratamientos psicoterapéuticos para el TLP derivan de observaciones provenientes de ensayos clínicos individuales. Sin embargo, también existen trabajos entre los que se reseñan algunos que consideramos relevantes y que muestran los beneficios de los tratamientos grupales. En este artículo se presentan los resultados de un estudio clínico controlado comparando dos tipos de conformación de grupos terapéuticos: un grupo homogéneo, constituido únicamente por pacientes limítrofes, y otro heterogéneo en el que se incluyeron además de pacientes con TLP, otros sin patología grave de la personalidad. El objetivo del estudio fue comparar la efectividad del tratamiento en función de la composición de los grupos. El tipo de estudio fue comparativo pre-test post-test. En él se consideraron las variables de sintomatología psiquiátrica, la calidad de vida, la autoestima, la <>, el apoyo social percibido, el ajuste social y los problemas interpersonales. Para el análisis estadístico se utilizaron pruebas no paramétricas. El diagnóstico de TLP se realizó de acuerdo a los criterios del DSM IV. Se excluyeron sujetos con diagnóstico de trastorno agudo en Eje I o trastorno neurológico que afectara de manera significativa su capacidad cognitiva, y sujetos con una probada historia de deserción de sus tratamientos. En ambos grupos sólo se reunieron sujetos del sexo femenino. Los resultados cuantitativos mostraron que las pacientes incluidas en el grupo heterogéneo tuvieron mayores cambios benéficos en las distintas escalas psicológicas y psicopatológicas aplicadas, mientras que las pacientes del grupo homogéneo tuvieron pocos o ningún cambio. En cuanto a los resultados cualitativos, se observó que las pacientes del grupo heterogéneo desarrollaron transferencias positivas que influyeron en un mejor desarrollo del grupo y en la obtención de cambios positivos, mientras que en el grupo homogéneo se vieron transferencias negativas que dificultaron el desarrollo adecuado de la terapia grupal, creando un ambiente caótico y con poca cohesión grupal. El desarrollo del proceso terapéutico fue notoriamente distinto en ambos grupos. El grupo homogéneo se caracterizó por una elevada competitividad y rivalidad entre las participantes quienes se disputaban el papel protagónico, además de hostilizar a los terapeutas. En contraste, el grupo heterogéneo alcanzó un nivel de funcionamiento más armónico que posibilitó cambios favorables en las pacientes con TLP. Debido al tamaño tan reducido de la muestra, no se puede afirmar categóricamente que las diferencias en los resultados obedecieron exclusivamente a la composición de los grupos. Es posible que el nivel <> de psicopatología fuera más grave en las pacientes incluidas en el grupo homogéneo, lo cual se puede inferir de su nivel de funcionamiento social en el momento de la inclusión en la terapia y otras observaciones clínicas colaterales. Los resultados sugieren que la composición de los grupos sí resultó ser una variable significativa, que se deberá tomar en cuenta para futuras investigaciones. Al mismo tiempo, estos resultados nos permiten sugerir que los pacientes con diagnóstico de TLP pueden ser tratados exitosamente mediante psicoterapia de grupo, siempre y cuando la composición del grupo incluya otros pacientes sin trastorno severo de la personalidad.

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